logo_encuentroslogo_encuentroslogo_encuentroslogo_encuentros
  • ¿Qué es Encuentros?
  • Actualidad
  • Testimonios
  • Respuestas
  • Te recomendamos
✕

Fiesta de Todos los Santos: un cielo abierto para todos

29 de octubre de 2025

6 min de lectura

Cada 1 de noviembre, la Iglesia celebra la Solemnidad de Todos los Santos, una jornada festiva que recuerda a quienes ya viven en la presencia de Dios y nos invita a mirar con esperanza el destino final de nuestra vida.

No celebramos sólo a los santos canonizados, sino a esa multitud anónima de hombres y mujeres que amaron, sirvieron y vivieron en amistad con Dios.

Esta fiesta nos abre a tres grandes preguntas que tocan el corazón de todo ser humano:

¿Hay algo más allá de la muerte?

¿Qué es la vida eterna?

¿La santidad es para todos?

1. ¿Hay algo más allá de la muerte?

La pregunta por lo que sucede después de morir ha acompañado al ser humano desde siempre. Millones de personas —filósofos, científicos, creyentes o no— han sentido la necesidad de entender si existe algo más allá, si la vida tiene sentido o si todo termina con el último latido.

El anhelo de trascendencia

La fe cristiana responde con esperanza: el hombre no está hecho para desaparecer, sino para vivir eternamente. La muerte no es el final del camino de la vida, sino el comienzo de una nueva.

Creer en la vida eterna no es huir de la realidad, sino mirarla con más profundidad: si esta vida tiene un sentido, es porque apunta a otra. No vivimos sólo para sobrevivir, sino para amar, dejar huella y alcanzar esa plenitud que solo Dios puede ofrecer.

Voces desde el umbral de la muerte

Celia Canseco: “Debajo del camión me encontré con Dios”

Joven universitaria, fue atropellada por un camión mientras iba a la biblioteca. Entre las ruedas, creyó que moría.

“Cuando eres joven, piensas que vivirás 100 años, que la muerte es algo muy lejano. Al menos yo lo pensaba. Hasta que, en ese momento, fui consciente de que la vida se me iba, de que me estaba muriendo. En la ambulancia tuve una sensación súper bonita, una paz, una tranquilidad que no pueda explicar que me moría… y fue ahí cuando le dije a Dios que me abandonaba en Él y que fuese lo que Él quisiera”.

Celia sobrevivió. Hoy comparte su testimonio convencida de que aquel encuentro con Dios cambió su vida para siempre.

Irmina: “Vi el cielo y a Jesús durante mi muerte clínica”

Tras sufrir una parada cardíaca, fue declarada en “muerte clínica” y permaneció en coma. Al despertar, relató con detalle lo que había vivido:

“Durante la muerte clínica vi todo lo que sucedía a mi alrededor. Y vi también a Jesús. Me devolvió curada.”

Su historia, recogida por Religión en Libertad, se ha convertido en testimonio de conversión para muchos.

“Vi con claridad que el bien y el mal son reales… y que Jesús me devolvía a la vida para dar testimonio de Él.”

Antonio Carmona: “Sentí dos figuras a mis pies mientras estaba en coma”

El conocido cantante granadino, miembro de Ketama, sufrió una grave infección que lo dejó en coma varios días:

“Vi dos figuras transparentes, una a mis pies y otra delante. No me dejaron solo ni un momento.”

Contó después que aquella experiencia lo llevó a fortalecer su fe: “Soy un hombre creyente; he sentido que no estaba solo”.

Colton Burpo: “El cielo es real”

“El cielo es real” (Heaven is for Real) está basado en la experiencia espiritual de Colton Burpo, un niño estadounidense que, con apenas cuatro años, estuvo a punto de morir durante una operación de urgencia.

Después de sobrevivir, Colton afirmó haber estado en el cielo, donde vio a familiares fallecidos a los que nunca había conocido.

Sus revelaciones espontáneas pusieron a prueba la fe de sus padres y dividieron a la pequeña comunidad donde vivían. Su padre, Todd Burpo, con la ayuda de la escritora Lynn Vincent, recogió la historia en un libro que superó los seis millones de ejemplares vendidos en más de treinta idiomas, y que más tarde fue llevado al cine.

Más allá de la curiosidad, la experiencia de Colton y de su familia ofrece una lección sobre la fe y la fortaleza: los padres del niño supieron vivir aquella prueba con entereza, apoyándose en su confianza en Dios.

La historia se convirtió en una llamada universal a mirar la vida —y la muerte— desde la esperanza.

2. ¿Qué es la vida eterna?

La Iglesia enseña que la muerte no es el final, sino el paso hacia la vida eterna, la participación plena en la comunión de amor con Dios. Esta esperanza se funda en la resurrección de Cristo: “Si hemos muerto con Él, también viviremos con Él.”

El Catecismo de la Iglesia Católica afirma:

“Cada hombre, después de morir, recibe en su alma inmortal su retribución eterna en un juicio particular que refiere su vida a Cristo.”

(CIC 1021-1022)

La vida eterna no es solo “una vida sin fin”, sino una vida plena, en comunión perfecta con el Amor.

San Agustín lo describe así: “Allí descansaremos y veremos, veremos y amaremos, amaremos y alabaremos… y este será el fin sin fin”.

El Cielo: plenitud de amor

El Cielo es la meta de quienes mueren en la gracia de Dios.

No es tanto un “lugar” como una relación: vivir para siempre en el Amor. Es la consumación del deseo más profundo del corazón humano: ser plenamente amado y amar sin medida.

El Purgatorio: el fuego que purifica el amor

El Purgatorio no es un castigo, sino un don de la misericordia divina: la purificación final que prepara el alma para el encuentro definitivo con Dios. 

En el Purgatorio reinan el amor y la esperanza, la firme convicción de la salvación eterna.

Podríamos decir que es el “vestíbulo del Cielo”, donde el alma aprende a amar perfectamente y a dejar atrás toda sombra de egoísmo.

El Infierno: la ausencia libremente elegida de Dios

El Infierno no es tanto un castigo impuesto por Dios, sino la consecuencia de una libertad que se cierra a su amor.

“La pena principal del infierno consiste en la separación eterna de Dios, en quien únicamente puede tener el hombre la vida y la felicidad.”

(CIC 1035 )

Dios no deja de amar, pero puede ser rechazado. La fe cristiana no se apoya en el miedo al infierno, sino en el deseo de no vivir sin amor.

3. La santidad: ¿es para todos?

Sí. La santidad no es un privilegio reservado a unos pocos héroes, sino la vocación común de todos los cristianos.

“Todos los fieles, de cualquier condición, están llamados a la plenitud de la vida cristiana y a la perfección de la caridad.”

(Lumen Gentium, 40)

Ser santo no significa no tener errores, sino dejarse transformar por Dios en medio de lo cotidiano: en la familia, en el trabajo, en la alegría y el sufrimiento.

Santidad cotidiana

Ser santo es vivir con coherencia, amar a los demás, construir paz.

La fiesta del 1 de noviembre es, por tanto, una invitación personal: a mirar a los santos no como seres inalcanzables, sino como compañeros de camino.

Conclusión: vivir con el cielo en el corazón

La solemnidad de Todos los Santos nos recuerda que la vida no termina con la muerte, sino que se abre a la eternidad.

Nos invita a mirar a los que ya han llegado —los santos— y a dejarnos inspirar por ellos.

Nos recuerda que cada día es una oportunidad para amar más, servir mejor y caminar hacia la vida eterna.

Las voces de quienes han rozado la muerte —Celia, Irmina, Antonio, Colton…— son un eco moderno de la promesa cristiana: la muerte no tiene la última palabra.

“El amor de Dios es más fuerte que la muerte.” (Cantar de los Cantares 8, 6)

*Te puede interesar: 

1 de noviembre: Día de Todos los Santos

Noviembre, mes de los difuntos

Llamados a ser santos

Tú también estás llamado a ser santo

Fray Ignacio y Fray Eduardo: millennials y monjes benedictinos

Libro electrónico para rezar sobre la vocación de los personajes del Evangelio: «Lo que Dios me pide es un regalo»

El día de todos los santos: significado y ejemplo para todos

ETIQUETAS

Últimas noticias

  • Diseñar nuevos mapas de esperanza: la educación como acto de amor noviembre 7, 2025
  • Fiesta de Todos los Santos: un cielo abierto para todos octubre 28, 2025
  • Una nueva imagen de María para el colegio Sant Marc octubre 27, 2025
  • Octubre: Mes del Rosario octubre 3, 2025
  • ¿Qué es Encuentros?
  • Actualidad
  • Testimonios
  • Respuestas
  • Te recomendamos
© 2023 Arenales Red Educativa